68: El cádaver de tu esposa

Al escuchar lo que Freya decía, simplemente no podía creerlo. La desesperación en sus ojos era grande y sabía bien que lo que decía no era mentira.

—Freya, espero que lo que dices sea una mentira —me negué a saber la verdad —, solo di que me quieres castigar y eso es todo.

—Ojalá quisiera castigar...

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