Capítulo 1675

Kevin observaba cómo el pequeño y delicado ano de Maurice se contraía y relajaba, casi como si intentara escapar de su toque. Su excitación creció, y comenzó a masajear y estimular suavemente pero con firmeza el ano de Maurice con sus dedos, como un motor vibrando rápidamente.

—¡Ahhh!

Olas de plac...

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