Capítulo 1686

En la espaciosa sala de estar, una mujer madura y atractiva de mediana edad yacía medio desnuda en el sofá. Su cintura esbelta se curvaba como una serpiente, sus caderas levantadas, y su piel suave brillaba. Sus pechos generosos subían y bajaban mientras emitía una serie de gemidos embriagadores. Cu...

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