Capítulo 161

La voz familiar me heló la sangre. Kely emergió de las sombras, su cabello plateado prácticamente resplandeciendo bajo la luz de las estrellas, esos inquietantes ojos púrpura fijos en nosotros con precisión calculadora.

—Vaya, vaya. ¿Qué tenemos aquí?— preguntó, su tono engañosamente ligero mientra...

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